¨Las palabras son la droga más poderosa de la humanidad.¨
Rudyard Kipling (1865-1936). Escritor inglés, Nobel de literatura 1907.

ESCUCHAR CON LOS OJOS.®

Por Nacho Navarro.
innavalle@hotmail.com

Frecuentemente nos habrá pasado con otras personas, que les oímos sin ponerles la atención que conviene y, al poquísimo rato, no nos acordamos de lo que nos dijeron, dañando con ello nuestra relaciones. De aquí, que las personas hoy, infinidad de veces recurramos a ruidosos sonidos, y para que nos pongan atención y/o que nuestras opiniones prevalezcan, usamos la fácil manera de levantar la voz, cual niños gritones de la lotería nacional, como si allí estuviera la clave. ¡Nada más equivocado!
Si reflexionamos un poco, nos daremos cuenta que para establecer convenientes canales de comunicación entre personas, lo más a la mano que tenemos es por un lado, sí hablar en los tonos adecuados, pero igual o más importante es poner toda nuestra atención a lo que la otra persona nos está diciendo. ¿Cómo?, se preguntará.
Una forma efectiva de lograrlo, percibo, es escuchando con lo ojos. ¿Qué?
Sí, porque cuando ponemos nuestra mirada en la persona que nos habla, estamos fortaleciendo nuestro proceso de comunicación, aplicando adicionalmente el sentido de la vista, que por cierto, registra y capta ese otro lenguaje importantísimo con que las personas también nos comunicamos: el lenguaje corporal, donde los expertos norteamericanos en comunicación Al Ries y Jack Trout, aseguran se sitúa el mayor porcentaje (80%) de la comunicación humana.
Y un ejercicio que ayuda a incorporar este conveniente hábito a nuestra vida diaria, es practicar el juego de adivinarle la película a quien se pone enfrente y mediante sus gestos corporales y sin emitir palabras en voz alta, nos explica una película.
Anímese. Empezará a escuchar importantes aportaciones de las personas que lo rodean. ¡Se lo aseguro!