Por Nacho Navarro
innavalle@hotmail.com @NachoNavarro8

No piense que le escribiré, “para estar bien, necesitamos practicar este deporte”, que por cierto, amigos míos lo hacen muy bien, lo que me parece estupendo; sino de lo que puede pasarnos con relativa frecuencia a usted y a mí. Que preparándonos bien, las cosas que queremos no nos salgan como lo planeamos –para eso nos entrenamos-, ¿razones?, las que queramos, quizá; por ejemplo, por la presión propia, la de quienes nos acompañan o están cerca; las circunstancias de ese momento o porque, de plano, nos faltó inspirarnos.
Y llegamos a creer, influidos por la cultura actual, que inspirarnos ocurre, de repente, que por arte de “magia” nos llega, olvidándonos por completo, a veces, que “inspirar” es también el acto consciente de infundir o hacer nacer en nuestra mente, la suya y la mía, afectos e ideas que nos aviven; esto es, que se hagan realidad y nos prevengan de la distracción y negatividad en que actuamos, por costumbre, en automático,
De esto trata, la magnífica fábula plasmada en la recomendable película independiente norteamericana de 2011 Siete días en Utopía, sobre la vida de un talentoso joven golfista que pierde su magnífico juego solo para reencontrarlo, viviendo siete días en el sureño pueblo Utopía del estado de Texas.
Los personajes centrales son el joven golfista Luke y el simpático Johnny, ex golfista profesional y dueño de un rancho con campo de golf, quien accidentalmente funge de mentor-entrenador de Luke, que tiene una exigente vida deportiva y de competición, que le hace cometer errores garrafales llevándolo no solo a perder torneos importantes, sino, lo peor, a vivir infeliz, poner en peligro su vida y a distanciarse de su seres queridos.
Pero la experiencia y sabiduría de Johnny, proporcionan al joven Luke tres valiosas e interesantes herramientas que le ayudarán a reencontrar su excelente juego y lo mejor, a inspirarse en la vida, mediante:
1.-SENTIR con la pesca, el ritmo, balance y paciencia del swing del golf; 2.-VER, pintando paisajes, el recorrido deseado de la pelota de golf y 3.-CONFIAR en las cualidades que uno mismo se ha forjado, enterrando literalmente el papel con todas las mentiras que hasta ese momento Luke se había creído y escribe.
Después de repetir y asimilar estas magnificas lecciones, Johnny le recomienda a Luke escriba en la pelota de golf, cada vez que compita, las iniciales SFT, que en inglés significan: ver, sentir y confiar, para que las recuerde y la presión del medio ambiente de los torneos de golf, no acabe por imponerse y le haga perder inspiración, tranquilidad y paz, conveniente.
De aquí que le invite a que la rente en DVD y vea en compañía de su familia, amigos, socios, colegas, compañeros de trabajo y de la escuela; porque estará de acuerdo, la inspiración personal, es algo conveniente para todos, allí donde estemos y que la cultura actual, pocas veces, nos influye a alcanzarla, reconozcámoslo.
¿Se atreve?